7 May, 2019

Los suelos con vitalidad generan alimentos vitalizados

por imohe en Notas de Autor

Los suelos con vitalidad generan alimentos vitalizados: Otras agri-culturas para un entorno saludable

Alicia Tornos. Unidad de Armonización Geobiología imohe. Mayo 2019

 

 «Evita trabajar una tierra que no esté enamorada»⁶

Hablamos de suelo como un elemento vivo, como un  organismo propio que se permite recrear continuamente a sí mismo. Un ente vital complejo1, un ecosistema con una gran variedad de especies animales y vegetales que cumplen una multitud de funciones que sostienen procesos vitales. Porque, un suelo cultivado no es únicamente un soporte para las plantas de donde ellas sacan su alimento; es mucho más.

La calidad vital de los alimentos que ingerimos proviene de la vitalidad del suelo donde han sido cultivados que a su vez recibe las influencias de todo su entorno. A lo largo de la historia, la humanidad ha sufrido periodos de hambruna debido a sequías, enfermedades y plagas de los cultivos; pero sobre todo, debido a la acción incorrecta del hombre, que ha provocado destrucciones importantes de los ecosistemas mediante estructuras agrarias y sociales basadas en la explotación egoísta.  Muestra de ello es “La Revolución Verde” que tuvo lugar después de la segunda guerra mundial: un tipo de agricultura basada en el uso de los agroquímicos (insecticidas/acaricidas, fungicidas, herbicidas y fertilizantes de síntesis) y de máquinas cada vez más potentes con un alto consumo de energías fósiles.

Desde entonces, la intención de generar alimento a gran escala desde una visión puramente mecanicista y explotadora de la vida, ha producido un abusivo uso de recursos naturales , y en consecuencia un impacto desfavorable  sobre la salud del suelo, y una degeneración de salud  en las plantes, animales y las personas. Un estudio liderado por Jan Pedro Arrebola de la Universidad de Granada, publicado en 2013 ²,advierte de altos niveles de contaminantes  orgánicos  persistentes  acumulados en el tejido graso de las personas, y lo relaciona con la gran  prevalencia de diabetes tipo 2 en personas adultas, independientemente del género, de su edad o de su peso. Hay muchos más estudios en relación a enfermedades emergentes de esta naturaleza, que nos pondrían los pelos de punta.

Alguno de estos pesticidas, los  órganos clorados y organofosforados, han sido utilizados comúnmente en Europa hasta hace muy poco; y muchos de ellos, autorizados actualmente son disyuntores endocrinos, sustancias que podrían alterar el equilibrio hormonal; una larga lista: todos ellos se caracterizan por ser persistentes y bioacumulables en el organismo.2,³

Ante este panorama, una pregunta obligada: ¿Se puede cultivar intensivamente y conseguir grandes rendimientos sin caer en los efectos perjudiciales y tóxicos?

Si nos decantamos por los cultivos biológicos y biodinámicos ⁴ podremos obtener buenos rendimientos, pero, habremos de virar nuestra escala de valores. La salud y la vida se resisten a ser interpretadas en términos exclusivos de la razón y la mecánica puramente rentabilista.

El suelo vivo está en continua evolución, expresión de la dinámica interdependiente de los organismos que lo habitan. En este el suelo se da una parte importante de los ciclos vitales que necesitan las plantas y otros seres vivos para alimentarse y vivir: de lo mineral a lo vivo y de lo vivo a lo mineral. Si estos organismos no tienen las condiciones de vida necesarias para desarrollarse los ciclos se paran. Y si los ciclos se paran, aparecen patologías por carencias nutricionales, problemas de metabolismo etc., un cebo para enfermedades y plagas.

Aparte de la agricultura biodinámica y ecológica, una aproximación mucho más sutil, la Agrohomeopatía, ofrece soluciones desde un paradigma muy distinto: entiende las plantas y los suelos de una manera muy diferente a lo aprendido por la agricultura convencional e incluso la ecológica. Este paradigma –como también hizo la agricultura biodinámica- lanza su mirada más allá del materialismo, de la física y la química clásicas, y reconoce otras realidades experienciales como una forma válida de conocimiento y aprendizaje; aunque no tengamos para ellas todavía explicación racional que encaje en la dictadura del método científico.

Podemos experimentar y relacionarnos con la vida y sus procesos a partir de un trabajo a otro nivel: el de la energía y el campo generativo de información. La agrohomeopatía utiliza la homeopatía ⁵ como agente bioinformativo,  para la mejora de la salud global de las plantas y los suelos, tanto para producción agrícola como para el cultivo de jardines y espacios. No hay mejor experimento, que el ayudar –con espíritu de observador participativo- a nuestros cultivos de esta nueva manera y saborear luego sus resultados.

Ello implica un gran compromiso como seres humanos, que pasamos de explotadores a guardianes de la naturaleza, y nos conduce a la oportunidad de una nueva relación que expresa la excelencia de una evolución compartida y un desarrollo saludable para generaciones venideras.

 

Referencias:

¹Nuria Cuch Arguimbau. Ingenieria agrónoma .

²https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/23290489

³Carlos de  Prada. Informe alimentos con residuos pesticidas alteradores hormonales.Fundacion Vivo Sano. “Endocrine disrupting pesticides: Implications for risk assessment” R. McKinlay, J.A. Plant, J.N.B. Bell, N. Voulvoulis Published in: Environment International 34 (2008) 168–183. Puede accederse a ella también a través del siguiente artículo: International Journal of Environmental Research and Public Health 2011, 8, 2265-2303; doi:10.3390/ijerph8062265. Effect of Endocrine Disruptor Pesticides: A Review .Wissem Mnif, Aziza Ibn Hadj Hassine, Aicha Bouaziz, Aghleb Bartegi, Olivier Thomas and Benoit Roig. Accesible en: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3138025/table/ t1-ijerph-08-02265/

⁴Agricultura biodinámica. Organización Demeter.

⁵FEMH. ORG. Federación Española de Médicos Homeópatas

⁶Refran flamenco. Cultivar en Armonía con la Luna y el Cielo. Susaeta Ediciones.

 

  1. Publicación de la Metamorfosis de las plantas por Johann Wolfgang von Goethe (per ordre de data)
  2. Primera edición del Organon de la medicina por Samuel Hahnemann.
  3. Curso de la Agricultura biologico-dinámica en Koberwitz . Rudolf Steiner
  4. Revolucion Verde.